Aventuras en la gran ciudad : Aventuras : Cultura
Aunque no se trata de una aventura en la naturaleza (como pensé que serian las aventuras), les comento de una aventura relámpago con toques culturales que con mi media naranja tuve la semana pasada.
Temprano a las 8 de la mañana tomamos el avión al capitalino terruño mejor conocido con el cariñoso mote del defectuoso. Esto es porque ese día en la noche asistiríamos a un concierto de música protagonizado por el dúo sueco que produjo la música que en mi juventud fue el fondo constante y que aun hoy con su nueva música me agrada un montón: Roxette.
Dado que hace muchos años la parte femenina (Marie) sufrió de un tumor cerebral que la dejo incapacitada por mucho tiempo pense que jamas tendria la oportunidad de verlos en vivo, pero desde el año pasado iniciaron una gira mundial la cual acabo ese dia en el auditorio nacional.
Con la música compuesta por la parte masculina (Per) cante bastante (y me asombro de no haber quedado afónico). Y por primera vez participe de un concierto de esa magnitud y me gusto!
Y ni aun esta aventura estuvo exenta de libros del todo, pues conocí la librería Porrúa frente a la alameda central, aunque desafortunadamente no la pude ver con calma; pero Porrúa es una de mis editoriales favoritas.
Eso en si podría ser toda la aventura, pero ademas de tortas, tacos de suadero y longaniza, a ello se suma el tomar el metro (nuestro único medio de transporte), aun a las 11:30 de la noche tras el concierto para regresar al hotel.
Temprano a las 8 de la mañana tomamos el avión al capitalino terruño mejor conocido con el cariñoso mote del defectuoso. Esto es porque ese día en la noche asistiríamos a un concierto de música protagonizado por el dúo sueco que produjo la música que en mi juventud fue el fondo constante y que aun hoy con su nueva música me agrada un montón: Roxette.
Dado que hace muchos años la parte femenina (Marie) sufrió de un tumor cerebral que la dejo incapacitada por mucho tiempo pense que jamas tendria la oportunidad de verlos en vivo, pero desde el año pasado iniciaron una gira mundial la cual acabo ese dia en el auditorio nacional.
Con la música compuesta por la parte masculina (Per) cante bastante (y me asombro de no haber quedado afónico). Y por primera vez participe de un concierto de esa magnitud y me gusto!
Y ni aun esta aventura estuvo exenta de libros del todo, pues conocí la librería Porrúa frente a la alameda central, aunque desafortunadamente no la pude ver con calma; pero Porrúa es una de mis editoriales favoritas.
Eso en si podría ser toda la aventura, pero ademas de tortas, tacos de suadero y longaniza, a ello se suma el tomar el metro (nuestro único medio de transporte), aun a las 11:30 de la noche tras el concierto para regresar al hotel.
Si van al DF y el metro les puede llevar hasta donde van, úsenlo, es seguro y rápido. Solo caminen rápido y no se detengan a mirar los murales para no parecer turista. En los andenes peguense a la pared hasta que ya casi llegue el metro.
El metro fue el que nos llevo y nos trajo al aeropuerto, todo muy bien (algunos apretujamientos a horas pico, pero nada que no haya experimentado quien haya viajado en camión urbano en Chihuas y por subsidiado, mucho mas barato). Todo muy bien, salvo porque me dejo el avión de regreso, pero no por culpa del metro, y mas bien es como dicen: "eso es otra historia".
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